Blinking Cute Box Panda

sábado, 30 de marzo de 2013

Dramma Queen - Capítulo 29


Dramma Queen
Capítulo 29


Desfilando un vestido blanco sin mangas corto, con unos zapatos color crudo de tacón cerrado, un saco rosa y una pequeña cartera del mismo color, Emma bajó las escaleras principales del palacio. { http://www.polyvore.com/lovely_may_time/set?id=49057848 }
Estaba molesta, de eso no había ninguna duda. El ceño fruncido, los ojos entornados y el caminar apretado, haciendo que los tacones resonaran como gritos contra el porcelanato, era claro indicio del estado de ánimo de la muchacha, alejando a toda persona, ya que nadie quería involucrarse o ser víctima de su mal humor.
La Reina y el príncipe Zayn, los esperaron en el hall de la recidencia Buckingham, saludando afectuosamente, pero sin olvidarse del protocolo real, a el matrimonio que abandonaba la estancia. Zayn, observó con tristeza, oculta tras una destellante sonrisa, a Emma, la cual le sonrió delicadamente y con mucho cariño apretó su mano, ya que era el máximo contacto que podrían llegar a tener. Pero, cuando sus manos se tocaron, Harry la quitó con algo de brusquedad, entrelazando sus dedos con los de Emma. Esta, se quedó callada, y así, unidos por sus manos, fueron hasta la limusina. Cuando entraron, con destemplanza quitó su mano de la de él.
El viaje fue aburrido, tranquilo y completamente silencioso. Algo que era normal que viniese de Harry, el cual escuchaba música o simplemente ignoraba a la castaña de su costado, pero esta vez, Emma ni siquiera se volteó a mirarlo una vez, y no abría la boca para nada. Callada, silenciosa y completamente absorta de lo que ocurría, tomó su celular, y revisó este, ya que había vibrado en su cartera. Tenía un mensaje de Carolina.
"¿Estás completamente loca? ¿Cómo es posible que engañes al churro de tu marido? Lo acepto, el otro está más bueno que faltar al colegio, pero... ¿Estás loca? ¿Qué dijo el príncipe Harry? ¿Y la Reina? Oh, no Emma... Quiero verte, hablarte y que me cuentes ¡TODO! lo que está pasando. O sea, ¿tu primer novio/esposo y lo engañas? Eres una perra... ¡Me encanta esta telenovela-real! ¿Y Zayn? ¿Qué dijo? ¿Se te declaró? ¿Te besó? O... ¿Lo hicieron? ¡NO! ¡ERES UNA ATREVIDA SI HICISTE ESO EMMA! Espera... ¿Lo haz hecho con Harry? ¿Y si quedas embarazada y no sabes de quien es? Ay, Emma... Llámame, contéstame, mándame aunque sea un mail, hasta con una carta me conformaría, o una paloma mensajera. Te amo, amiga. Caro."
— ¿Qué? —murmuró terminando de leer el mensaje tan explícito de Carolina, sorprendida ante la información que tenía su amiga.
— ¿Que, qué?
—No, nada... —comentó Emma, guardando su teléfono suavemente en la cartera. No quería que Harry se enterase de las barbaridades que su amiga preguntaba, y mucho menos, que pensara lo que ella había escrito. Así que se abstuvo hasta llegar a su nuevo hogar, para hablar seriamente con Carolina.
Pasaron por los enormes jardines del palacio de Windsor, donde Emma quedó maravillada por la belleza del lugar. Era tranquilo, luminoso, y todo lleno de vida. El castillo, era antiguo y sumamente delicado, como todo lo que había conocido de la familia real británica, con los pastos verdes recién cortados, las murallas de piedra levantándose con furia grácil hasta rozar casi los cielos, y las ventanas de cristal cincelado iluminando el interior de la residencia. Entraron hasta la casa real, donde todos los empleados del palacio los esperaban, dándoles una cálida bienvenida.
—Es un placer tenerlos acá, Príncipes. Espero que podamos servirlos a su gusto, y cualquier cosa que requieran, lo pueden pedir. Estamos a su completa disposición, Su Majestad.
—Muchísimas gracias. —contestó Harry, mientras Emma solamente sonreía, acompañada de Fémina, Eva y por supuesto, Allison. Llegaron al lado oeste del castillo, donde se encontraban las habitaciones de los príncipes. De colores claros y en un estilo clásico medieval, la habitación de Emma era espaciosa, delicada y confortable. Los muebles finos se esparcían con precisión en el lugar, dejando una sala de estar cómoda para cualquiera. Luego, en una de las puertas de dicha habitación, se encontraba el dormitorio de la princesa, donde la cama era una de las cosas que más espacio ocupaba, de dos plazas, con tules cubriendo el techo de esta, mullida y cálida. Luego, dos puertas, una que daba al baño real, y la otra, al armario de la muchacha. Emma se tiró como un saco de papas, boca abajo, en la cama.
— ¿Sucede algo princesa? —indagó Allison, colocándose a un costado de la cama. La castaña tomó su cartera, sacó su celular y le enseñó el teléfono a la rubia.
— ¿Cómo es posible que ella sepa todo eso, Su Majestad?
—No lo sé, Alli. Nunca le dije que salí con Zayn, tampoco... ¡Nada! ¡No hablo como Carolina desde hace dos semanas más o menos! —dijo alterada Emma, mientras Allison, se sentaba a su lado, reconfrotándola, mientras Fémina y Eva, estaban en la sala de estar.
— ¿Usted miró las noticias ultimamente?
— ¿Noticias? No, no miro tele. —contestó ella. La rubia se paró de la cama, y fue hasta la televisión de plasma que estaba frente a la cama de la muchacha. Esta, prendió la televisión, y buscó los canales de información. Los cuales eran muchos, ya que no solo eran de índole inglés, si no que también de toda europa, algunos latinos, otros asiánticos y los restantes estadounidenses. Allison se detuvo en un canal ingles, el cual estaba dando un reportaje.
"—A eso de las nueve y media, diez de la mañana, del día de hoy, paseando alegremente por las calles de Londres, se pudo ver a la princesa Emma, heredera en primera línea al trono Austro-Húngaro y esposa del primer heredero en sucesión al trono inglés, acompañada del príncipe... Pero no precisamente su marido. Su acompañante era el príncipe Zayn de Edimburgo, medio hermano del príncipe Harry de Gales. Comprando ropa, llendo a un café y haciendo actividades clásicas de turístas, se los vió a los jóvenes sonrientes en Oxford Street. ¿Qué hacian ambos jóvenes, juntos, esta mañana? ¿Sin la compañía del marido y hermano de ambos?—"
—Oh por dios, estoy muerta.
—Princesa, no se preocupe... Esto es... —dijo Allison, tratando de buscar las palabras correctas pero fue interrumpida por el periodista de la televisión.
"—Quiero que recordemos que a pesar de que la princesa Emma, es princesa, de ahora, una de las nuevas máximas potencias del mundo, es una princesa "cenicienta" ya que no fue criada como una heredera al trono, si no, como una simple chica, en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Pero, ahora es toda una soberana, así que... ¿Qué opina la Familia Real ante el comportamiento de la princesa? —"
—Estoy más que muerta.
—Princesa Emma. Princesa Emma. —llamó Eva, golpeando la puerta del dormitorio de la castaña.
—Pasa. —contestó desganada ella, y así, entraron Eva y Fémina.
—Es la quinta vez que nos llaman de la BBC, también acaban de llamar de programas de televisión y radios de UK, también de USA y Argentina... Las cadenas de Austria están insoportables mandando mensajes y mails, y...
— ¿Qué? Espera, espera... ¿Qué quieren?
—Quieren que haga una declaración ante las fotos de usted y... El príncipe Zayn.
—Pero... Él y yo somos amigos, es que... —dijo nerviosa Emma, temblando.
—Tranquilícese, princesa. —Le dijo Allison, sentándola en la cama con cuidado. —Traiganle un té. —dijo mirando a las empleadas, cuando Fémina salió pitando de la habitación. —Princesa... Creo que debería hablar con el príncipe Harry, el va a saber qué hacer.
— ¿Hablar? ¿Qué le voy a decir? ¡Va a matarme!
—Princesa, si dejamos que la prensa continúe hablando, el rumor va a crecer tanto que vamos a ser incapaces de pararlo.
—Pero...
—Usted haga lo que crea más conveniente, Alteza. —dijo Allison, parándose de su agache. —Pero, si quiere mi humilde consejo. Hable con el príncipe Harry, el sabe manejar a la prensa, y va a saber explicar lo sucedido.
— ¡Emma Ana Sicilia Isabel Habsburgo-Lorena! —gritó Harry, golpeando la puerta del salón principal de su habitanción. —¡Abre la puerta en este mismo instante!
— ¿Qué hago? ¿Qué hago? Va a matarme.
—Solo está un poco enfadado, pero no hay nada que una charla cordial no arregle, no va a hacer nada.
— ¡Abre la puerta en este mismo instante! ¡Juro que voy a matarte Emma! ¡Abre la maldita puerta!
—Ay, no... Oh por dios, me va a matar.
—Creo que deberíamos abrir. —dijo Fémina.
—No, no... Si abres me va a matar.
—Y si no le abrimos la puerta, también.
—Si, pero va a tardar más tiempo en matarme, Eva.
—Princesa, creo que debería hablar con el príncipe, ahora. Es el momento.
— ¿El momento? ¡El momento de morir querrás decir! ¡Va a fusilarme!
— Si no abres la maldita puerta ahora, la voy a tirar abajo, Emma. —advirtió golpeando una y otra vez la puerta de la muchacha.
—De acuerdo, de acuerdo... abre la puerta, pero... Si se pone loquito, llama a seguridad.
—Entendido, alteza. —Y así, Eva fue a abrir la puerta en donde se encontraba un furioso Harry, el cual tenía la mirada perdida, y enfurecida.
— Váyanse, las tres. Ahora. —dijo, mirando a Allison, Eva y Fémina, estas miraron a la princesa, la cual rogaba con la mirada que no se fueran. — ¡Ahora! ¡Es una orden! —dijo Harry, haciendo que estas salieran casi corriendo de la habitación, pidiéndole disculpas a Emma con la mirada. —¿Has visto las noticias? —preguntó con sarcasmo. — ¡Dicen que soy el cornudo más grande del Reino! ¡¿Qué digo del reino?! ¡Del mundo!
—Sabes que no es así...
— ¿Lo sé? ¿De verdad lo sé, Emma?
— ¡¿Cómo puedes pensar una cosa de mi así?! ¡De tu hermano!
—De mi hermano puedo esperar cualquier cosa, es un zorro traicionero. Y de ti... Ya no sé que creer.
—Solo salimos a pasear, nada más. No hicimos nada malo, pero la gente, mal interpreta todo.
—Yo también soy "la gente", así que háblame y dime que está pasando aquí. Dime, que vas a decir, o mejor dicho, que vamos a decir en la conferencia de prensa.
— ¿Conferencia?
—Tenemos que arreglar los desastres que haz hecho hoy. Mañana en la mañana, voy a citar a las cadenas informativas más importantes del mundo para hablar, así que, compórtate y piensa algo coherente que no arruine al Reino Unido ni al Imperio Austro-Húngaro.
—Es que, no sé... ¿Qué debo hacer?
—Miente. Di que estabas con él como amigos y esas cosas que me has dicho a mi.
—No es mentira, somos amigos cabeza dura.
— ¿Encima te enojas tu conmigo?
—Claro que si... Es que eres irritante. —dijo Emma, sentándose en su cama. —No eres capaz de mirar un poco a tu alrededor y ver como se siente la gente que está contigo, solo te importa de ti, lo que te afecte a ti, o lo que tu sientas... El resto del mundo puede desaparecer y a ti no te importa.
— ¿Ahora el desconsiderado soy yo? Dime, que te aqueja tanto, princesa...
—En menos de dos meses me he enterado que soy la princesa del Imperio Austro-Húngaro, y me he convertido en la princesa consorte de Reino Unido. He dejado mi país, a mi familia, a mis amigos, mi escuela, mi todo... He tenido que cambiar mis modos de hablar, de vestir, de comer, de dormir. He tenido que ir a clases de protocolo, de idiomas, de economía, política, ciencias, equitación, natación, tenis, música, geografía, pintura y mucho más. He perdido a todos mis amigos, ¿sabes? Tengo dieciocho años y eso es lo que hacemos los adolescentes, pelear con nuestros padres y estar con nuestros amigos. He perdido a mis padres y a mis amigos. Y El único amigo que está conmigo, el único al que no perdí era a Zayn. Él está conmigo por eso, porque me quiere y entiende lo que me pasa, entiende que me siento sola, que mi vida cambió en un giro de 360°. Y sé que a ti no te importa, que todo lo que quieres de mi, es que me coloque a tu lado y sonría ante todo el mundo, pero... No puedo, ya no puedo.
—Emma, si que me importa lo que sea que te suceda. —su voz ruda y altanera, cambió de tono completamente, a una dulce y tranquila, mientras la abrazaba con la mirada.
—Este mundo no es para mi, ya creo que no lo soporto. La gente aquí es envidiosa, egoísta, avara, hipócrita. Son malos. Aparentan quererse y respetarse, rodeados de una tela de perfección, pero... Solo están buscando el lastimarse y pisar la cabeza de otro para escalar posición. En mi mundo no era así, en mi casa no, en mi escuela tampoco. Era todo más tranquilo, más... Sano.
— ¿Piensas irte? —preguntó Harry, dolido. — ¿Piensas dejar tus obligaciones?
— ¿Mías? Son solo mías por haber nacido... Eso no cuenta.
—Claro que cuenta, tus obligaciones fueron otorgadas igual que a mi. Solo por nacer debo de ocuparme de este Reino.
—Pero a ti te educaron para eso, yo... Ni siquiera me siento del Imperio al que supuestamente tengo que proteger y cuidar. Soy argentina, nací en Buenos Aires, mis padres también. Tengo su cultura, su idioma, costumbres, todo es latino, no austro-húngaro. Ni siquiera se hablar el idioma, o... Los idiomas.
—Esas son cosas poco elementales, lo que importa es... Piensa, piensa en lo que haz hecho por ese Imperio hasta ahora.
—Nada. —contestó con tristeza, Emma.
— ¿Nada? Yo creo que si. Como tu dijiste, dejaste todo. Tu familia, amigos, hasta tu país, te estás tratando de adaptar a una nueva familia, a una nueva ciudad y... Has hecho mucho por ellos Emma.
—En realidad, acepté casarme contigo porque...
—Lo sé, una pequeña amenaza de mi abuela de sacarte todo. Ella es así, cuando no consigue las cosas por las buenas, las toma por las malas.
— ¿Sabías que me casé por dinero contigo?
—No creo que haya sido por dinero. —dijo él, sentándose en la cama de la muchacha, mucho más tranquilo que minutos atrás. —Creo que lo hiciste para salvar a tu familia, y el sacrificarte por ellos, habla bien de ti, Emma. Sé que casarte conmigo fue un suplicio...
—Tu eres un suplicio. —comentó riéndo la castaña, haciendo que el muchacho frunza el ceño.
—Cierra la boca, niña tonta. —dijo este, mirándola mal. —Pero, más allá de eso, se que te importa tanto la gente de Austro-Hungría, como la del Reino Unido, ¿verdad?
—Así es, se que... Es importante esto, que no es sencillo, pero merecen algo mejor. No estoy calificada para hacer algo así, soy muy mala en todo.
—Eso no es verdaad, ¿eres buena en historia no es así?
—Si, solo en eso.
— ¿Ves? todos somos buenos en algo, pero eso no quiere decir que porque tengamos facilidad en algo, nos tenemos que abocar a ello. En realidad, es mejor no ser bueno en algo, y darle todo el esfuerzo a eso que nos cuesta. Tiene más valor, Emma. Cuando lo consigas, te sentirás mucho mejor, porque sabes que lo hiciste con esfuerzo y dedicación. Así que si el alemán, el francés, el inglés, la economía, política o lo que sea, te cuesta mucho, cuando lo logres con esfuerzo, vas a estar orgullosa de ti misma. Yo voy a estar orgulloso de ti.—comentó Harry, mientras le acariciaba suavemente la mejilla, y la castaña sonreía ante ese contacto.
—Piensa en esto... ¿Te acuerdas de la niña que te regaló a Harry?
— ¿Kate?
—Así es... Me has dicho que no podía cuidarlo más por su situación económica. Piensa en ella, y piensa en los miles de niños que hay así. Piensa, que depende de tus decisiones futuras, puedas cambiar el futuro de esos niños, puedes hacer que cumplan sus sueños. Medita en eso, Emma. Que la posición en la que estás es, luego de la Reina y el Primer Ministro, la más importante de todas en el país, y que, cuando vayas a Austro-Hungría, va a ser la más importante también. Tu, eres capaz de cambiar el destino de las personas y hacer única su vida. ¿Estás dispuesta a esforzarte por Kate? ¿Por esos niños? Por todas esas personas que confían en la Familia Real. Confían en ti.
—Si. Tienes razón. —dijo Emma, sonriendo. —Voy a dar lo mejor de mi, por mi familia, por Kate, por todos los nenitos que pasan miseria.
—Tu familia, aunque esté lejos, va a estar orgullosa de ti.
—Aunque no quieras, príncipe pervertido... Tu también eres mi familia. —comentó sonriendo Emma, a lo que el castaño, también sonrió.
—Ahora, baja que tenemos que comer.
—No tengo hambre, tengo sueño... Estoy cansada.
—De acuerdo, te dejo descansar. —dijo el muchacho, parándose de la cama. —Mañana tenemos la conferencia de prensa, buenas noches. —finalizó, saliendo del cuarto de la chica.

2 comentarios:

  1. BUENISIMO!!!!! Si no entendiste B-U-E-N-I-S-I-M-O! siguiente, plisssss que en casa estamos intrigados... y ve pensando en hacer un maraton de tren de medianoche. jajajaja lo espero con ansias. besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ljadslkjdsald Gracias c: recién empecé a subir el precio de la elegancia c: la semana que viene o cuando termine esta voy a subir tren de medianoche porque si no se me hace muy dificil :p besito & GRACIAS ♥

      Eliminar