Alyssa Gardner oye los susurros de los insectos y a las flores. Teme acabar en el psiquiátrico, como su madre. La locura recorre su familia desde su antepasada Alicia, la niña que inspiró el País de las Maravillas de Lewis Carroll. Pero ¿y si los susurros de las flores no son alucinaciones? ¿Y si el País de las Maravillas existe y la está llamando? Alyssa descenderá por la madriguera del conejo hacia un mundo mágico, pero también despiadado. Durante su increíble aventura, tendrá que decidir en quién confiar: en Jeb, su mejor amigo, por el que siempre se ha sentido atraída, o en el fascinante y seductor Morfeo, su guía en el País de las Maravillas y con el que lleva soñando desde que era niña.
Leí este libro semanas después de leer Alicia en el país de las maravillas, y es que si bien sabía más o menos cómo iba la historia, quería tener la lectura original antes de embarcarme en un libro “basado en” (y además, porque me parece la idea de el libro original, absolutamente genial y un clásico). La cuestión es que, este libro me ha encantado. Si bien se hizo denso en algunas partes, mantuvo el hilo narrativo siempre arriba, con personajes definidos y con una historia original y retorcida, que le da un toque oscuro al original de Carroll.
Susurros nos cuenta la historia de Alyssa, quién desde los trece años, es capáz de escuchar los susurros de las plantas y de los insectos, y teme terminar encerrada en un psiquiátrico como su madre, ya que la locura recorre su árbol genialógico, desde Alice Liddel, quién es su tatara-tatara-abuela y además, la niña que inspiró los libros de Carroll. El resumen es bastante sencillo, y la verdad es que la historia me parece de lo más original, y muy atrapante, y es por eso que lo terminé relativamente rápido (me engancho con muchos libros a la vez y voy leyendo pedacitos de cada uno :p).
Alyssa descubre, o más bien sospecha, que el país de las maravillas es real, y que hay una maldición en su familia, y es por eso, que arriesgándose a millones de peligros, va a caer a la madriguera del conejo blanco, para así solucionar los problemas de su familia, y evitar que su madre termine en una sesión de electrroshock en el sanatorio. Desde el inicio, el libro nos plantea fantasía pura. Cómo Alyssa puede escuchar las flores y los insectos, cómo su madre delira sobre fiestas de té y flores parlantes, sobre espejos que reflejan cosas que no están en la realidad, etc. Y eso me pareció lo mejor, que ya sepamos que este es un mundo fantasioso, y no que te lo tiren como una pelota en medio del libro.
El desarrollo principal, empieza a suceder cuando ella cae (o se tira, cómo se quiera ver), a la madriguera del conejo, junto con Jeb, su amigo, y aparece en el País de las maravillas, allá enfrentará millones de peligros, de un mundo que no es para nada tan mágico y divertido como en el cuento de Lewis, sino que es oscuro y tenebroso, con criaturas malvidas y llenas de poder y mágia. El mundo de las maravillas de A.G Howard me ha encantado, si bien prefiero la versión dulce, la original, esta está con un giro genial, que me ha parecido de lo más entretenido.
La protagonista, Alyssa, al principio me pareció algo loca y un poco depresiva (no digo que sin razones, por que la chica tiene una vida complicada), pero que después, a pesar de tener sus momentos de quiebre y de estar asustada, siempre se mantuvo al pie del cañón a lo largo de toda su travesía por el país de las maravillas. Fue valiente, una característica que es sin duda, muy valorada en un personaje de esta categoría, y más, que se vea en una chica. Por que seamos sinceros, odio a las chicas tontas y llorosas, que necesitan a un caballero en armadura para sobrevivir.
Pero claro, no hay libro juvenil-fantasía-sobrenatural (? que pueda tener a una chica sin su príncipe azul, pero acá Alyssa tiene dos. Uno azul, y otro... ¿Negro? Sí, porque Jeb es quién siempre va al rescate, su amigo de toda la vida, su amor platónico desde hace años. Y luego está Morfeo, un ser sobrenatural de la tierra del submundo, con poderes mágicos, oscuro y lleno de secretos. Y obviamente, todo el libro, más allá de la historia central, es el debate con este triángulo amoroso. Jeb, sinceramente, no me ha caído muy bien. O sea, tiene todas las cualidades del “chico de tu sueños”, pero me ha parecido de lo más controlador, muy dominante y lo peor, es que Alyssa se lo permite demasiado. Por otro lado, (a pesar de sus intenciones), Morfeo siempre la alienta a que ella puede sola, a que es fuerte y que va a salir a delante sin que él la tenga entre algodones. Tal vez, (además de ese aire oscuro de personaje malvado que es completamente lo mío xD), eso es una de las cosas que más me han gustado de este personaje.
Para no extenderme más (esta reseña fue muy larga, pero es que quería destacar los puntos más importantes), les digo que el final me ha encantado: fue muy revelador, a la par de que dio un giro de 360° y cambió el panorama completo. Con respecto a Morfeo y Jeb, creo que la autora manejó a ambos personajes a la mar de bien, y es por eso que no voy a tardar en darme un tiempito para leer la continuación de la trilogía. Saludos, Danna.
#1 • Susurros
#2 • Delirios
#3 • Ensnared (Entrampado)
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