La vida prevalece sobre la muerte, y la muerte consume una vida.
Todo ha cambiado. La ciudad asume el giro inesperado de los acontecimientos con Angelo ostentando más poder que nunca gracias a Enrico y todo marcha según lo previsto.
Los Carusso empiezan a dominar Roma.
Los Gabbana se fragmentan.
Sarah se ahoga en el amor y el odio.
Y Kathia se pregunta por qué pertenece a un todo, y ya no es nada.
Una situación que desbordará incluso a aquellos que creían tenerla controlada.
Colapso es la tercera parte de la serie Mírame y Dispara o Bajo el Cielo Púrpura de Roma. Quería y no quería leer este libro, luego del final de Traición que mucho no me agradó.
Si bien el primer tomo me encantó, esta serie no hizo más que decaer y decaer con cada nuevo libro, por lo que espero, el cuarto libro
(si es que hay, aunque estoy segura que con este final, debe haber), sea muchísimo mejor, o al menos, un poco mejor.
El libro inicia justo después del final del segundo, en dónde Cristianno ha muerto y tanto los Gabanna como los Carusso, se enfrentan a una guerra sin presendentes de la mafia. La historia, si bien parece “entretenida” no tiene ni pies ni cabeza. Las más de trescientas páginas, es una serie de sucesos que transcurren y transcurren, sin ninguna clase de emoción.
Creo que las bases de una novela/cuento: inicio-nudo-descenlace, Neymar no las ha aprendido del todo, porque este libro es puro nudo y tiene un descenlace (si es que lo tiene) que era predesible (al menos, para mí), desde el final de Traición. El libro lo narran tres personas: Kathia, Mauro y Sarah. Kathia, fiel protagonista, es entendible. Mauro, el primo de Cristianno, que ahora se vuelve importante porque antes no era más que una pared pintada, cuenta los sucesos del lado de la familia Gabbana
(creo que es importante por eso), y Sarah... La finalidad de Sarah no la entendí desde el segundo libro, cuando apareció de la nada y se instaló en la historia, siendo insoportable, voluble, quejica y ahhh! La detesto.
En realidad,
de este libro sólo me han gustado, más o menos, tres personajes; Mauro, más que nada por su parecido a Cristianno, y porque su POV era el más interesante de todos,
Giovanna, la irritable prima de Kathya que ahora tiene otro papel, y me ha gustado, y
Valentino, que es el malote de la novela. Y no es que me han encantado, sólo me han sido “lo mejorcito”, porque sinceramente,
los personajes dan lástima. Creo que hay varias razones: 1) son demasiados. Hay tantos nombres, tantos personajes que no sé quién es quién, y me mareo.
2) Todo ocurre muy rápido, no hay descripciones de nada (más allá de la ropa de Kathia, y del cielo de Roma ¬¬), por lo que uno no sabe bien cómo lucen o qué los hace especiales a estos personajes, más allá de que están buenísimos y que se visten de Armani y Prada.
3) Bueno, no tengo punto tres, pero creo que con los otros dos puntos, es suficiente.
A falta de Cristianno, tenemos a nuestra protagonista, Kathia, siendo una Magdalena suicida en todo el libro.
¿Has leído a Bella Swan, de Crepúsculo, mejor centrémonos en Luna Nueva? Bueno, Bella es el alma de la fiesta, comparada con Kathia. Y la entiendo, no sólo el chico se murió, sino que no tiene familia, y la que tiene, no le da casi ni la hora, y la adoptiva, es una mierda. Pero... ¿dónde quedó la luchadora? ¿la mafiosa? En ningún lado,
Kathia se volvió patética, y me irritaba, hasta el punto de esperar con ansías que pasara X (más abajo digo, con spoiler) o que se matara...
SPOILER GIGANTE! Cuando dije que pasara X, me refería a que apareciera Cristianno, porque oh novedad, al final del libro, sabemos que no murió... Algo que yo supuse, antes siquiera de terminar el segundo libro.
Esto fue tan esperado, tan trillado, que aburrió. Pero, si Cristianno hubiera aparecido a mitad del libro, o algo así, sería pasable. Pero no,
él apareció en la última página, haciendo que me comiera todo ese libro enrevesado más que una novela mexicana. Espantoso, sólo eso.
FINAL DEL SPOILER!! No sé siquiera por qué, a este libro tan malo, le pongo dos puntos. Tal vez, por el cariño que le tuve a Mírame y Dispara, porque la verdad que no se lo merece. Es un libro sencillo
(que roza la mala literatura), y me costó terminar de leerlo porque no me enganchaba.
Una historia sin pies ni cabeza, personajes sin gracia, y una narración de pena. Lo siento, Neymar, pero espero que mejores más en el cuarto libro. Nos estamos leyendo, Danna.
#3 • Colapso
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