Ni testigos ni pistas ni cadáver. Josy, la hija de doce años del conocido psiquiatra Viktor Larenz, desaparece en misteriosas circunstancias de la consulta del médico que la trata de una extraña enfermedad. Cuatro años después, Viktor, sumido en una profunda tristeza, se ha retirado a una remota casa en una isla del Mar del Norte. Allí lo localiza una hermosa desconocida que padece alucinaciones: ve constantemente a una niña pequeña, una niña que padece una extraña enfermedad y que desaparece de la consulta del médico sin dejar rastro. Viktor inicia entonces un tratamiento con la desconocida, pero la terapia se convierte paulatinamente en un dramático interrogatorio. ¿Es posible lo inconcebible?
Empecé a leer este libro por las muchas buenas reseñas que encontré de él y porque la curiosidad era tal que en cuento lo encontré en pdf lo empecé a leer. Tenemos un libro thriller-suspense que da muchas vueltas y te marea para que no sepas el final... Hasta la última página. Hacía mucho tiempo que no leía un libro con un final no predecible (es bueno este cambio), y sin duda me ha empujado a querer leer a Fitzek en el futuro. El libro nos cuenta que la hija de doce años del prestigioso psiquiatra Viktor Larenz ha desaparecido en una consulta de médico ya que padece una rara enfermedad. Cuatro años han pasado, sin noticias de Jocy, se desvaneció en el aire y nadie sabe lo que sucedió con ella. Pero a pesar de ello, su padre continúa exahustivamente buscándola, viva o muerta.
Depresivo por la desaparición de su hija, el Dr. Larenz se auto-exilia a una isla remota en la que tiene una casa familiar, y se pone como tarea responder las preguntas sobre el suceso de Jocy de una revista, pero entre medio de ese trabajo tan doloroso y exhaustivo conoce a Anna, quién por todos los medios le pide que atienda su caso, pero el doctor se niega, ya que ha dejado de atender pacientes desde hace muchos años. Pero la curiosidad puede con él, cuando Anna le cuenta sobre una de sus alucinaciones, Charlotte, quién resulta encajar en las descripciones de Jocy, y que al parecer, ella tiene todas las respuestas mediante su historia, de la desaparición de la niña.
El libro en sí trata de eso, con saltos en el tiempo (pasado a presente), contándonos cómo Viktor descubre qué es lo que le pasó a Jocy detalle a detalle desde los confines de la isla. El relato es sencillo, atrapante y te deja a cada capítulo con ganas de más. Lo leí prácticamente en un día, no podía soltarlo, y es que al tener capítulos cortos (amo eso en los libros), pasabas de uno a otro en poco tiempo, siempre terminando con una incógnita. La historia es fluída, original y con un final que te deja con la boca abierta. Es una historia en la que los personajes carecen de importancia, y se piereden y desdibujan un poco debido a que la protagonista es la narración en sí, pero a pesar de ello, es muy bueno. Sin duda, lo recomiendo. Es corto, fácil de leer, y muy adictivo. Nos leemos, Danna.
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