Reseña: Hasta el último suspiro - Anne Swärd

En la Suecia rural de los años setenta, la emocionante y trágica historia de amor entre Lo y Lukas: un amor juvenil para toda la vida.

Una novela hermosa y desgarradora. Una historia que nos habla del amor con el que todos soñamos, pero que pocos nos atrevemos a vivir.

Lukas la ama. Ella no alberga ninguna duda.

Lo sabe desde niña, cuando su curiosa mirada infantil se cruzó con la de aquel adolescente hosco durante un incendio.

Lo sabe a pesar de las advertencias de su madre y del resto de su familia, que la previenen contra un joven tan distinto a ellos.

Lo sabe, incluso después de averiguar que el pasado de Lukas esconde rincones oscuros.

Lukas la ama.

Pero quizá todo sea demasiado intenso, demasiado prematuro. Quizá, como le repite su madre a todas horas, el amor no sea una emoción en la que se puede confiar.

 Cuando empecé a leer este libro (por puro impulso, que lo encontré en un blog de descarga de pdf), me esperé una historia de amor normal, arrancando con un amor prohibido, etc, etc. Pero "Hasta el último suspiro" de Anne Swärd, me sorprendió y gratamente. Porque sí, tenemos una historia de amor, pero que no es sencilla, y que es más que prohibida. El libro nos cuenta la historia de Lukas y Lo, que son vecinos en su pequeño pueblo y se conocen en un incendio cercano a la casa de Lo, que supuestamente fue generado por el propio Lukas. Lo tiene seis años y él trece, pero desde ese mismo momento, ellos se vuelven amigos, aunque Lukas desde el inicio demuestra que está enamorado de ella, y pretende esperar a Lo a que cresca para que la cosa no se indecente ni mucho menos.

Pero no todo es tan sencillo. Tanto Lo como Lukas, tienen un pasado familiar fuerte. Mientras que a ella su padre la abandonó y su madre es un poco fría y distante a su alrededor, creciendo alrededor de Lukas desde pequeña, este es el saco de boxeo de su padre constantemente y no tiene recuerdos de su madre ni de su país natal, Hungría. El libro nos va contando como Lukas y Lo atraviesan la infancia, la adolescencia y la etapa adulta, cómo los mismos van tejiendo una historia que va más allá de la intimación, del amor o la amistad. Lukas y Lo se vuelven, de alguna manera, una sola persona. Es así de intensa esa relación, y desde el principio me han encantado.

Y es que ambos personajes son diferentes a lo común. Lukas es un pooc loco, valga decir. Es bastante introvertido, silencioso y previsorio. Muy trabajador y con los pies en la tierra, mientras que Lo es más voladora, ella vive el momento aquí y ahora. Y estas diferencias, si bien con su cariño y compañía mutua las van llenando, hay un momento de quiebre (que no voy a comentar para no arruinarles el libro), que estas personalidades tan dispares se ven distanciadas. Cómo ya dije, la pareja me ha gustado mucho. ¿Es extraña? Sí, un poco lo es, pero es extramaente-perfecta-imperfecta, y me ha gustado mucho. Ambos personajes, con sus idas y venidas, sus defectos bien marcados y sus virtudes en alzas también me han agradado, los sentí... Más humanos, cómo que la autora en ningún momento se puso a limar esos defectos despreciables, sino que los dejó bien en la mira del lector, y es agradable leer personajes no tan brillantes.

El libro hace muchos saltos en el tiempo, desde el nacimiento de Lo, a la adolescencia, a su niñez, a su edad adulta, y vuelta a la adolescencia. Es un contante ir y venir, y esto no es mucho de mi agrado, pero Swärd logra mantenerme en vilo, queriendo saber qué sucede con Lo y Lukas. Además de ellos, tenemos a la numerosa familia de Lo que, si bien no son personajes centrales, se cuenta mucho su historia. Más que nada de la mamá de ella, Katerina, que si bien es una mujer un poco hosca que al principio no me caía del todo bien, al final, terminó ablandando mi corazón. El final, debo decir que me dejó un poco estupefacta, no es que no me gustó, es que no me lo esperaba tan... Crudo. Creo que soy más de los finales rosados, no sé, mi corazón débil no soporta ni el más mínimo nivel de amargura, y Lo y Lukas han aportado bastante amargura. En conclucióin el libro es muy bueno, un poco repetitivo en algunas partecitas y esos saltos en el tiempo que a veces no se sentendía mucho, pero más allá de eso, el libro es genial. Saludos, Danna.