Blinking Cute Box Panda

domingo, 26 de agosto de 2012


Libro Abierto
Capítulo 20

Llegue a mi casa, prácticamente arrastrándome todo el trayecto hacia ella. Cuando llegué a mi morada, me encontré con mi sonriente madre, pero al verme en el estado deplorable, creo imaginar, en el que me encontraba, su sonrisa se esfumó por completo.
— ¿Qué sucedió, Romance? —preguntó asustada, y en ese momento exploté.
Comencé a llorar de una manera desgarradora, mientras me arrojaba a los brazos de mi progenitora, quien me acunó en ellos como si fuera una niña pequeña. Las desgarradoras y dolorosas imágenes poblaron mi mente. El recuerdo de Harry desangrándose en el suelo, con cortes en su pecho y brazos, intencificaba mi llanto y el dolor de saber si aún el respiraba o no.
—Cálmate Ro, quiero que respires. —dijo mi madre, mientras yo me ahogaba en mi propio llanto. La mujer me dirigió al sillón del living, lo más amplio para que nos sentemos las dos y lo que se encontraba en el menor trayecto.
—Hija, por favor, dime que ha ocurrido. —y al decir eso, nuevamente mi cabeza se pobló de el duro y vertiginoso recuerdo de Harry.
—Él... ¿está muerto?—dije, más para mi misma que para ella, pensando en la espantosa conjetura, de que el tal vez no recistió las heridas que el enfermo de Liam le había producido y en el camino a su casa o al hospital había...No, no, claro que no. Él no podía morir, él no me podía dejar, no se podía marchar así como así.
— ¿Quién está muerto, Romance? —preguntó horrorizada mi madre.
—Mamá, te pido por favor... Necesito verlo, ir a buscarlo, ahora.
— ¿A quién? Son las ocho de la noche, Romance. No puedes ir a la casa de nadie... — la interrumpí, ya me estaba fastidiando.
— Mamá, entiende, necesito verlo, saber como está... Qué le pasa, si me necesita... por favor...
— Estas muy alterada, cariño.— me dijo mi madre, quién tomó el teléfono y esperó a que contestaran del otro lado de la linea.
— Disculpe que lo moleste, doctor Her, pero necesito su ayuda... — dijo mi madre, mientras escuachaba lo que el doctor le contestaba.— lo que sucede es que mi hija está demasiado alterada, y necesito que venga... — se volvió a escuchar el murmullo— Acá lo espero.
— Entiéndelo, necesito verlo...
— Romance, por favor. Quiero que te calmes.— me rogaba mi madre, mientras hacia que me vuelva a sentar en el sillón.
— ¡No! ¡Necesito verlo! — le grité, y las lágrimas volvieron a hacer acto de presencia.
— ¿A quién? 
— ¡Por favor mamá! ¡Me muero si le pasa algo! —le decía, mientras lloraba desconsoladamente.
— ¿Qué le pasa a Ro? —indagó mi hermano, asustado. Me miró con temor, para luego observar a mi madre, a que le contestara.
—No lo sé, Román. Llegó así de la escuela y no entiendo que le pasa.—le contestaba mi madre, mientras tomaba al niño entres sus brazos.—Ya llamé al doctor Her, el que vive en el piso de abajo, él va a venir a verla.
— ¡No quiero ningún médico! ¡Lo necesito a él!
— ¡Romance cálmate...! — en ese momento, ella se calló, ya que el timbre sonó y se dirigió a atender la puerta.— Muchas gracias doctor Her, es que no se lo que le pasa, llegó así de alterada de la escuela, me dice que alguien murió y no se que más.
Un hombre, de unos cincueta años, cabello negro con hebras plateadas, se acercó a mi. De cerca, pude contemplar sus ojos verdes y las arrugas que se asomaban al rededor de sus ojos y las típicas lineas de expreción. El médico, estaba vestido con una camisa, corbata y un saco escote en V a cuadros, zapatos negros y un pantalón de vestir del mismo color.
— Hola Romance, soy el doctor Henrie Her, tu madre está muy preocupada por ti.
— ¡Déjeme! ¡No me toque! ¡Solo quiero saber como está el! — grité verdaderamente desesperada, ya que mientras yo perdía tiempo acá, Harry podría haber muerto.
El hombrele hizo una seña a la dueña de la casa, y esta con mi hermano pequeño, que se encontraba escondido detrás de la pared, salieron del lugar.
— Dime... ¿quién es el? — preguntó, en un tono serio pero amoldeado con dulzura. Sabía que no podía decirle quien era, ya que, a pesar de que mi odio hacia Liam iba en aumento, no podía culparlo de intento de homicidio. De eso se encargarían sus padres.
—Se va a morir... Él lo mató... necesito verlo... —decía mientras la cordura abandonaba mi cuerpo y la suplantaba la desesperación, y el sosiego no parecía querer aparecer en mi cuerpo.
—Romance, necesito que me digas ¿quién va a morir? ¿y quién es el culpable de su muerte?
—¡No le importa! ¡solo a mi me importa él! —le grité mientras mis manos temblaban de forma irregular, y mi corazón latía desenfrenadamente.
—De acuerdo, pero dime quién es el.
—¡No! ¡Sólo si me lleva a verlo!—le contesté, grabando en mi mente el maravilloso momento que estábamos viviendo antes que el animal de Liam lo atacase.
—Necesito que me digas quien es, porque si no no puedo llevarte con el.
— ¿Va a morirse? —pregunté, recordando la sangre espesa y de color mortífera que salía de su anatomía. — ¡No! un ser tan hermoso como él no puede morir, es demasiado perfecto para este mundo... —Dije, mientras el miedo iba acrecentándose en mi, y yo me iba acostando en el sofá del living.
—Eso, Romance. Quiero que te tranquilices...
—Si él muere, yo también... —susurré, pensando en lo importante que era Harry para mi... en lo que estoy sufriendo con la simple duda de su muerte... ¿Qué sucedería en verdad si él muriera?
—Amalia, voy a sedarla, necesita descansar tranquila, está demasiado alterada. —le comunicó el médico a mi madre. 
— ¡No! ni se le ocurra dormirme. —lo amenacé, mirándolo con el ceño fruncido. —Necesito estar despierta para saber como está, para saber si el está bien... Necesito verlo, por favor, se lo ruego. —dije, ahora inmersa en gotas de agua salada.
—Mañana vas a saberlo, Romance... pero así, no puedes hacer nada, en el estado en el que te encuentras... Sólo... Relájate.—y eso fue lo último que oí.
Después de ello, sentí una molestia en mi brazo, para luego ir cerrando los ojos de apoco, mis párpados pesaban demasiado, y en contra de mi voluntad, a pesar de que sabía que tenía que estar despierta para saber que pasaba con él. La oscuridad hizo acto de presencia, dejándome sumergida el ella, mientras yo me perdía en la inconciencia. 


4 comentarios:

  1. Nooooooooooooo :( me dió penita! Por alguna razón, los últimos dos capítulos me recordaron Crepúsculo. Harry como vampiro y Liam como hombrelobo. Está buenísima! Porfavor síguela ! BESOS :)

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    1. jhadkjashdkj muchas gracias por leer, & a crepusculo, maybe es que cuando la escribi estaba con crepusculo, cronicas vampiricas & mas libros de vampiros muy obsecionada ñlaskdl xd

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  2. Jaja Juro que yo igual concuerdo con Coto Millan :) !!
    Por favor continuala o Moriré D: !!

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    1. muchas gracias :3 & no no te mueras lasjkdlasjd xD sisi la sigo obviusly (? :p

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